El comité de cata del Concurso de Vino Institucional para el 2008, del servicio técnico del Consejo Regulador D.O.C. Rioja, ha seleccionado Finca La Emperatriz Rosado 07 en la categoría de rosados como el mejor Vino del Año para presidir todos los eventos y acontecimientos promociónales del Consejo Regulador.
Los viñedos de Bodegas La Emperatriz están ubicados en Baños de Rioja, en un entorno estratégico y privilegiado, la finca perteneció a la emperatriz Eugenia de Montijo. Las viñas se hallan distribuidas en diferentes parcelas en el margen derecho del río Oja, en un amplio valle situado a 570 m de altitud, delimitado por las sierras de Cantabria y de La Demanda, y por el que cruza el camino de Santiago. Sus 101 hectáreas de terreno hacen de esta finca una de las más extensas de La Rioja Alta. El enólogo David Gonzalez es el responsable de la elaboración del vino seleccionado por el Consejo Regulador, fruto del trabajo en la viña experimental. Las peculiares características del terreno, con una capa superficial de 40 centímetros de canto rodado de color blanco que esconde por completo un suelo con estructura franco arenosa, dotan al viñedo de un apropiado drenaje, una adecuada iluminación de los racimos, una buena disposición radicular y un aporte limitado de nutrientes, este conjunto de condiciones definen el terruño que aporta esta particular elegancia a los vinos de la bodega. El rosado seleccionado se elabora con un 90% de uva tempranillo y un 10% de uva garnacha procedente de parcelas con edades comprendidas entre 5 y 60 años, su sistema de conducción es en espaldera alta y vaso tradicional. En la cosecha seleccionado por el Consejo Regulador, la uva llegó a la bodega en óptimas condiciones después de una cuidadosa recolección, tras una maceración de 24 horas se procedió al sangrado de los depósitos, fermentando el mosto a temperaturas que oscilaron entre 14-17 ºC. Una vez finalizada la fermentación alcohólica se mantuvo el vino en el depósito con sus lías finas durante 2 meses aproximadamente. El resultado ha sido un vino que a la vista se presenta con un color frambuesa, limpio y brillante. En nariz posee una alta intensidad aromática, destacando en el inicio los aromas de fruta tropical y pera madura, así como notas florales y de caramelo de fresa. En boca resulta graso, fresco, con predominio de la fruta. Un excelente vino rosado que sin duda representará la tipicidad del terruño riojano de la mano del Consejo Regulador D.O.C. Rioja.
Los viñedos de Bodegas La Emperatriz están ubicados en Baños de Rioja, en un entorno estratégico y privilegiado, la finca perteneció a la emperatriz Eugenia de Montijo. Las viñas se hallan distribuidas en diferentes parcelas en el margen derecho del río Oja, en un amplio valle situado a 570 m de altitud, delimitado por las sierras de Cantabria y de La Demanda, y por el que cruza el camino de Santiago. Sus 101 hectáreas de terreno hacen de esta finca una de las más extensas de La Rioja Alta. El enólogo David Gonzalez es el responsable de la elaboración del vino seleccionado por el Consejo Regulador, fruto del trabajo en la viña experimental. Las peculiares características del terreno, con una capa superficial de 40 centímetros de canto rodado de color blanco que esconde por completo un suelo con estructura franco arenosa, dotan al viñedo de un apropiado drenaje, una adecuada iluminación de los racimos, una buena disposición radicular y un aporte limitado de nutrientes, este conjunto de condiciones definen el terruño que aporta esta particular elegancia a los vinos de la bodega. El rosado seleccionado se elabora con un 90% de uva tempranillo y un 10% de uva garnacha procedente de parcelas con edades comprendidas entre 5 y 60 años, su sistema de conducción es en espaldera alta y vaso tradicional. En la cosecha seleccionado por el Consejo Regulador, la uva llegó a la bodega en óptimas condiciones después de una cuidadosa recolección, tras una maceración de 24 horas se procedió al sangrado de los depósitos, fermentando el mosto a temperaturas que oscilaron entre 14-17 ºC. Una vez finalizada la fermentación alcohólica se mantuvo el vino en el depósito con sus lías finas durante 2 meses aproximadamente. El resultado ha sido un vino que a la vista se presenta con un color frambuesa, limpio y brillante. En nariz posee una alta intensidad aromática, destacando en el inicio los aromas de fruta tropical y pera madura, así como notas florales y de caramelo de fresa. En boca resulta graso, fresco, con predominio de la fruta. Un excelente vino rosado que sin duda representará la tipicidad del terruño riojano de la mano del Consejo Regulador D.O.C. Rioja.